La fisioterapia moderna ha evolucionado integrando métodos de electroterapia que emplean corrientes eléctricas para el tratamiento de lesiones, el control del dolor y la rehabilitación muscular. Estos avances ofrecen alternativas no invasivas y efectivas para quienes buscan alivio o recuperación de dolencias sin depender exclusivamente de medicamentos. En esta guía, profundizaremos en los tipos de corrientes utilizadas, para qué sirven las corrientes en fisioterapia, beneficios y contraindicaciones, desde el punto de vista de los equipos médicos y productos sanitarios.

¿Qué son las corrientes en fisioterapia?

Las corrientes en fisioterapia se refieren a la aplicación controlada de electricidad para estimular los tejidos del cuerpo y promover la curación, el alivio del dolor o la mejora de la función muscular. Estas técnicas, conocidas como electroterapia, permiten aplicar una corriente específica en una zona determinada, logrando diversos efectos terapéuticos. Para llevar a cabo este tratamiento, se emplean dispositivos diseñados específicamente para cada tipo de corriente, con electrodos que se adhieren a la piel del paciente.

Tipos de corrientes en fisioterapia y su aplicación

Existen diferentes tipos de corrientes eléctricas, cada una con aplicaciones específicas en la fisioterapia:

  1. Corrientes analgésicas
    Las corrientes analgésicas buscan reducir la percepción del dolor mediante el bloqueo de las señales de dolor enviadas al cerebro. Entre las más utilizadas encontramos:

    • TENS (Estimulación Nerviosa Eléctrica Transcutánea): Esta corriente de baja frecuencia es común en el tratamiento del dolor crónico o agudo, como el dolor de espalda o la artritis. A través de un dispositivo TENS, se producen impulsos eléctricos que activan las fibras nerviosas, bloqueando el dolor.
    • Corrientes de baja frecuencia (10 Hz): Estimulan la producción de endorfinas, generando un efecto analgésico natural. Este tipo de corriente es ideal para dolores musculares y articulares.
  2. Corrientes antiinflamatorias
    Diseñadas para reducir la inflamación en tejidos lesionados o sobrecargados, estas corrientes ayudan a mejorar la circulación en la zona afectada, lo que favorece la recuperación.

    • Corrientes de alta frecuencia (100 Hz): Estas corrientes, utilizadas en lesiones deportivas, logran penetrar en tejidos profundos y acelerar la recuperación de esguinces, desgarros y otras lesiones de alta intensidad.
    • Interferenciales: Generan una corriente de mediana frecuencia que permite tratar áreas más grandes, como el abdomen o la espalda, y reducir el dolor y la inflamación de forma efectiva.
  3. Corrientes de estimulación muscular (EMS)
    Utilizadas tanto en la fisioterapia como en el entrenamiento deportivo, las corrientes EMS producen una contracción muscular controlada, ayudando en la rehabilitación y fortalecimiento muscular.

    • Estimulación Muscular Eléctrica: Conocida como EMS, esta corriente se emplea en pacientes que han perdido masa muscular o movilidad debido a una lesión o cirugía. También se utiliza en deportistas para mejorar la fuerza muscular y la resistencia.
    • Corrientes rusas: Estas corrientes de frecuencia media fueron desarrolladas para los atletas soviéticos y se enfocan en la tonificación muscular profunda, estimulando un mayor número de fibras musculares.

Beneficios de las corrientes en fisioterapia

Las corrientes eléctricas en fisioterapia ofrecen múltiples beneficios, desde el alivio del dolor hasta la prevención de la atrofia muscular y la mejora de la circulación:

  1. Control efectivo del dolor
    Al bloquear las señales de dolor o estimular la liberación de endorfinas, la electroterapia es una opción válida para quienes padecen dolores agudos o crónicos. Pacientes con enfermedades como la fibromialgia, la artritis o lesiones deportivas encuentran en estas corrientes un alivio que les permite reducir el consumo de analgésicos.
  2. Prevención de la atrofia muscular
    Para pacientes que han sufrido una inmovilización prolongada, como después de una fractura o cirugía, la electroestimulación ayuda a prevenir la pérdida de masa muscular y fuerza. Las corrientes EMS estimulan las fibras musculares, favoreciendo el mantenimiento de los músculos sin necesidad de actividad física intensa.
  3. Aumento de la circulación sanguínea y oxigenación de tejidos
    Al mejorar la circulación, estas corrientes promueven la oxigenación de los tejidos y ayudan a eliminar toxinas, acelerando así el proceso de cicatrización y recuperación de las lesiones.
  4. Mejora del rendimiento deportivo
    Las corrientes de estimulación muscular son ideales para atletas que desean aumentar su rendimiento. En combinación con el entrenamiento convencional, estas corrientes ayudan a desarrollar fuerza y resistencia muscular, potenciando la capacidad atlética de forma segura y controlada.
  5. Relajación muscular
    Las corrientes de baja frecuencia ayudan a relajar los músculos tensos y aliviar la tensión acumulada, proporcionando una sensación de alivio y bienestar en las zonas afectadas.

Equipos médicos para aplicar corrientes en fisioterapia

Para aplicar estas terapias, existen dispositivos de electroterapia especializados. Algunos de los equipos más utilizados son:

  • Dispositivos TENS: Aparatos portátiles que permiten el tratamiento del dolor de forma sencilla. Son ideales para dolores crónicos y para uso en casa bajo la supervisión de un profesional.
  • EMS (Electroestimulación Muscular): Este equipo está diseñado para la recuperación muscular y la prevención de la atrofia. Puede ser utilizado tanto en clínicas de fisioterapia como en el ámbito deportivo.
  • Electrólisis Percutánea Terapéutica (EPT): Técnica que permite tratar lesiones musculares y tendinosas aplicando una corriente mediante una aguja, estimulando la regeneración de los tejidos.
  • Corrientes interferenciales: Empleadas en clínicas y centros especializados, estas máquinas combinan varias frecuencias para crear un campo de interferencia que cubre grandes áreas del cuerpo, proporcionando alivio del dolor y mejorando la circulación.

Usos de las corrientes en fisioterapia

  1. Rehabilitación de lesiones
    La electroterapia es una técnica común en la rehabilitación de lesiones como esguinces, tendinitis y fracturas. Al estimular los músculos y mejorar la circulación en la zona afectada, estas corrientes ayudan a acelerar la recuperación y a prevenir complicaciones.
  2. Alivio del dolor crónico
    Pacientes que sufren de condiciones crónicas como el dolor lumbar, la ciática o la artritis encuentran alivio en la electroterapia. Al bloquear las señales de dolor, los dispositivos TENS y las corrientes analgésicas permiten una reducción de la percepción del dolor.
  3. Mejora del tono muscular
    La electroestimulación muscular es una herramienta eficaz para mejorar el tono muscular y evitar la atrofia en pacientes que no pueden realizar actividad física. Esto es fundamental para personas en proceso de rehabilitación o que padecen enfermedades crónicas.
  4. Entrenamiento en atletas y deportistas
    Muchos atletas utilizan la electroestimulación para mejorar su rendimiento. Al aplicar estas corrientes en grupos musculares específicos, pueden potenciar su fuerza, velocidad y resistencia sin causar fatiga.

Contraindicaciones y precauciones

Aunque las corrientes en fisioterapia son generalmente seguras, existen algunas contraindicaciones y precauciones a tener en cuenta:

  1. Pacientes con marcapasos
    La electroterapia está contraindicada en personas con marcapasos o dispositivos implantables, ya que las corrientes eléctricas pueden interferir con el funcionamiento de estos equipos.
  2. Embarazo
    Aunque en algunos casos se utiliza electroterapia para aliviar el dolor durante el embarazo, la aplicación de corrientes en el abdomen está contraindicada. Siempre es recomendable consultar a un profesional antes de utilizar estos tratamientos.
  3. Problemas cardíacos y enfermedades graves
    Las personas con problemas cardíacos o enfermedades graves deben evitar la electroterapia, especialmente aquellas corrientes que afectan la circulación.
  4. Piel sensible o irritada
    La aplicación de electrodos en piel sensible, irritada o sobre heridas abiertas no es recomendable, ya que puede causar molestias o infecciones.
  5. Epilepsia
    La electroterapia no es adecuada para personas epilépticas, ya que las corrientes eléctricas pueden inducir crisis en pacientes sensibles.

¿Qué organismo regula en España el uso de corrientes en fisioterapia?

El organismo que regula el uso de corrientes en fisioterapia en España es la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), encargada de asegurar que los dispositivos médicos cumplan con los estándares de seguridad y eficacia.

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