El Método Pilates, es una disciplina que cada vez tiene más adeptos. Si nunca has ido a una clase y quieres saber algo más, en este post encontrarás información sobre este método.
Se realizan ejercicios muy precisos que requieren de gran concentración, basados en la respiración, la coordinación y el control del cuerpo sobre la mente. Esta disciplina aporta una serie de beneficios como un mayor aumento de nuestra fuerza, flexibilidad y una gran mejora en nuestra postura corporal.
Este método mundialmente conocido, se lo debemos a Joseph H. Pilates. Desde pequeño tuvo curiosidad por el conocimiento del cuerpo y los límites físicos que podía alcanzar, tanto de fuerza como de flexibilidad. Esto le llevó a interesarse por el estudio de los movimientos de los animales, filosofías orientales y los métodos de entrenamiento de los antiguos griegos y romanos. Ya de adulto practicaba lucha, culturismo, thai chi, yoga, meditación zen y gimnasia. Sus ejercicios son una mezcla de todas estas disciplinas y se hicieron muy populares entre coreógrafos y bailarines en la Nueva York de los años 50. A partir de ahí su método empezó a conocerse y difundirse a nivel mundial.
Índice
Principios del método pilates:
- Concentración: la mente debe intervenir en cada movimiento. Haz que el cuerpo y la mente funcionen como un equipo.
- Control y precisión: la mente debe controlar completamente cualquier movimiento físico. El movimiento y la actividad descontrolados producen un régimen de ejercicios fortuito y contraproducente que pueden llevar a una lesión.
- Movimiento fluido: realiza una gran cantidad de movimientos de una manera fluida y controlada. No hay que apresurarse en ningún paso, hay que hacerlos de una manera suave y uniforme. Se pasa al ejercicio siguiente en cuanto se siente el esfuerzo, evitando en todo momento los movimientos rígidos.
- Respiración: respirar correctamente mientras se hacen los ejercicios. Debemos inspirar llevando el aire hacia las costillas, abriéndolas un poco y provocando de esta manera, un estiramiento de los músculos intercostales.
El Método Pilates centra su atención en el abdomen, parte inferior de la espalda y nalgas. Los músculos relacionados con estas zonas del cuerpo sujetan la columna vertebral y los órganos internos, y son responsables de la postura que adoptamos. Todos los ejercicios de esta disciplina se centran en esta parte del cuerpo para estabilizar el torso y poder estirar y alargar el cuerpo, mejorando la cintura, reduciendo el estómago y corrigiendo la postura.
¿Qué ocurre durante una clase de Pilates?
Se realiza una tabla de ejercicios de varios niveles, de menor a mayor, y a medida que se van superando niveles de esfuerzo, se pasa de un ejercicio al siguiente. Una clase suele durar entre 45 -60 minutos. Empieza con un calentamiento de la zona pélvica y abdominal al ritmo de la respiración. La respiración seguirá activa y cambiará según el ejercicio durante toda la clase.
Joseph H. Pilates también diseñó máquinas para poder realizar estos ejercicios de una manera precisa, por lo que las clases pueden ser de máquinas o suelo, o incluso combinando ambas técnicas. Para los ejercicios de suelo solo es necesaria una colchoneta y una serie de accesorios ayudan a realizar los ejercicios aumentando la resistencia y permiten aislar, activar y trabajar los músculos más profundos del cuerpo. Podemos utilizar accesorios como: aro, pelota, balón, bandas elásticas o un rulo de pilates.
Al final de la clase se hace una serie de ejercicios de estiramiento para compensar el esfuerzo realizado. El Método Pilates es un ejercicio suave, pero intenso que requiere de gran concentración y precisión. Quien lo prueba, generalmente, ¡repite!
Si nunca has ido a una clase de Método Pilates pero quieres saber qué tipo de ejercicios se hacen, echa un ojo a esta infografía. Y si te gusta, ¡no lo dudes! ¡Busca un centro de pilates cerca y prueba una clase! Pero confirma que la persona que imparte la clase tiene formación en este método. Para evitar lesiones, es muy importante que asegurar que la postura es correcta y la respiración, la adecuada. Para evitar lesiones, mejor empezar siempre de la mano de un profesional.